ĀæCĆ³mo podrĆa cambiar la revoluciĆ³n audio y video que estamos viviendo nuestra forma de leer y de hacer libros para niƱos?
Dice el psicĆ³logo Jordan Peterson que la mayorĆa de las personas prefiere escuchar a leer. Leer no es un acto natural y por lo tanto requiere mĆ”s nivel de atenciĆ³n y una abstracciĆ³n mayor.
Hay varias cuestiones entrelazadas que curiosamente tambiĆ©n surgieron hace unos aƱos cuando el libro digital luchaba con el libro fĆsico. Al principio no se sabĆa bien la diferencia y las editoriales la trataron como un cambio de formato, de igual a igual. Fue un error. Cada uno tenĆa su uso independiente y estaba en los detalles averiguar cual era.
DespuĆ©s estaba toda una generaciĆ³n que sabĆa que los libros costaban dinero pero se podĆan descargar gratuitamente juegos y libros. El cambio no fue fĆ”cil, por ejemplo en el libro digital o la app infantil los padres no querĆan pagar mĆ”s de 2-3 ā¬ por un libro o un juego cuando habĆa tantos gratis. Las editoriales digitales pequeƱas y medianas desaparecieron porque solamente las grandes empresas se podĆan permitir ofrecer libros o juegos gratis, tampoco tenĆan medios de promociĆ³n, no bastaba con que el producto fuera bueno.
En el caso particular del libro infantil, hace unos aƱos, cuando la industria pensaba que todo iba a cambiar porque Ćbamos hacĆa al libro digital sucediĆ³ lo inesperado. Los chicos no se concentraban en la historia o las imĆ”genes, preferĆan jugar, tocar, escuchar. La historia y las imĆ”genes se perdĆan completamente, eso implicaba perder la esencia misma del libro. El libro, tambiĆ©n para los pequeƱos, necesitaba de una atenciĆ³n. Aprendimos que leer bien no es tan sencillo ni tan natural. Requiere un esfuerzo , una concentraciĆ³n.
HabĆa otro cuello de botella grande; la distribuciĆ³n, no era tan abierta como la de las librerĆas , era monolĆtica. Apple , Amazon o Android tenĆan el control absoluto sobre lo que se vendĆa y lo que no. No habĆa una red que mĆ”s o menos fuera intelectualmente independiente, todo estaba condicionado a los primeros 50 puestos. Se vendĆa el 90-100 % ahĆ.
Hoy en dĆa el libro fĆsico es variado y hay muchas editoriales medianas y pequeƱas porque hay miles de libreros que se miran y estudian los catĆ”logos y piden a las editoriales los libros que intuyen les pudieran interesar . Si Ć©stas desaparecieran serĆan las distribuidores digitales las que deberĆan elegir quĆ© libro promover y cual no. Que yo sepa Amazon o Apple no revisa lo que se publica, todavĆa no existen los libreros independientes en Amazon o Apple.
Yo creo que el podcast tendrĆ” un sitio , el libro digital otro, el libro fĆsico otro y el audiolibro otro. EstĆ”n por resolver los grandes problemas que no se han resuelto todavĆa con el libro digital. Yo creĆa que el libro digital iba a cambiar el mundo por sus posibilidades. Por 20 ā¬ se puede construir un libro digital con baterĆa solar con las 1000 mejores obras de la literatura y hacerlo llegar a cada niƱo con una educaciĆ³n pobre. Pero ese es el menor de los problemas, el problema es hacer saltar los mecanismos para que los lea con ganas y los entienda. Esa serĆa la verdadera revoluciĆ³n.
0 responses on "La huella de la revoluciĆ³n audio e video en los libros"